Estos meses he estado trabajando en dos trabajos aún sin terminar. Me propuso mi profesora de Madrid, Pepa, que hiciera el tapiz de muñecas japonesas, y lo terminé hace un par de semanas. Todos las tiras las he cosido a máquina, y tengo que reconocer que me sale más preciso a mano, pero quería probar.
A mi sobrino Víctor, que acaba de cumplir 5 añitos, le encantan los dinosaurios. En una revista de Labores del Hogar vi un tapiz/alfombra de dinosaurios y pensé hacerlo para su cumple pero no me da tiempo. Ahora mismo está a falta de hacerle las hojas de los árboles que ya tengo algunas terminadas, aunque aún no las he cosido al tapiz. Se trata de una composición infantil.
Ahora hace mucho calor para acolchar y tampoco puedo coser mucho por el mismo motivo, así que se lo regalaré para la Navidad. En estos momentos, todos tienen sus ojos, que no se los he bordado si no que se los he puesto con una especie de botones.
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