Hace mucho tiempo hacía cosas de punto de cruz. Realmente no es mi labor favorita y de hecho, después de terminar uno que tenía a medias sobre molinos y casas holandesas, decidí que ya no haría más; se me cansan mucho los ojos y no me divierte mucho hacerlo.
Como tenía varios realizados con estos motivos, y no sabía muy bien qué hacer con ellos, tuve una idea con el segundo que hice (con tres cuadros), y cuyo resultado me ha encantado. Un perchero para mi habitación. Estoy pensando hacer con otros dos que tengo (de dos cuadros), un cuelga llaves con uno de ellos y con el otro, para los paños o utensilios de cocina. Aún no lo he decidido, pero ya os los mostraré cuando los haga.
Por lo pronto, el perchero ha quedado así.